Editorial
Por Éric Laurent
Verdad y goce
Hoy va a comenzar el torneo de Golf de Augusta, el primero de la serie de los grandes
torneos. Va a marcar el retorno de Tiger Woods sobre los greens después del
espectacular escándalo sexual que se destapó luego de un accidente de auto a fines
de noviembre de 2009. Rápidamente, este accidente reveló ser el producto de una
mezcla detonante de una escena doméstica explosiva y de un somnífero Ambien©
comercializado en Francia bajo el nombre de Stilnox©. El nombre genérico es
Zolpidem©. Se le conocen efectos secundarios como el sonambulismo o
comportamientos automáticos extraños o inapropiados. Una docena de amantes del
mejor golfista de la historia pronto iban a manifestarse además de la que su mujer
había llamado desde su celular esa noche. Una de ellas, por otra parte, iba a revelar el
uso afrodisíaco que hacía Woods del Ambien©, uso inventivo, que no está en el
repertorio de la noticia, acompañarlo con Stilnox©. La particularidad de este
escándalo que ha impactado a los comentadores es doble. Por una parte la
abundancia de amantes, su sorprendente vulgaridad, especialmente una de los pornstars
que da a conocer de manera exhaustiva los detalles de la relación. Por otra
parte la crudeza de los textos de contenido sexual que la estrella del golf dirigía a sus
múltiples conquistas. Estos SMS rápidamente han recibido el nombre de “sextos”.
El conjunto contrastaba violentamente con el aire de yerno ideal que había impuesto
Woods cuyos contratos publicitarios habían alcanzado las sumas más elevadas jamás
registradas en la historia de todos los deportes.
Hasta la muerte de su padre, en el 2006, Tiger llevaba una vida ejemplar consagrada
al perfeccionamiento de su juego. Parecía tímido con las damas. Este perfeccionista
ha sido capaz, aunque tenía 10/10 en los dos ojos, hacerse operar para mejorar su
visión. Todo estaba en armonía. Había logrado ser el jugador sobre el que reposaba el
éxito de la audiencia televisiva cuando transmitían los torneos de golf, que no tienen,
no obstante, el ritmo frenético del football, del basket, o incluso del tenis.
¿Cómo iba a salvar los semblantes? La apuesta tenía su envergadura para el deporte,
el monto de la renta de la televisión y los anunciantes. Lo primero que él ha
emprendido es una terapia para su “adicción sexual”. Es ahora norma para los actores
o deportistas que son descubiertos como serial-philanderers.
Esta concepción de la adicción sexual contribuye a invalidar la vieja concepción de la
“perversión” con la admisión de los derechos de los gay en la armada, los matrimonios
del mismo sexo, la salida del transexualismo del cuadro de las afecciones, etc. Todo lo
concerniente a la sexualidad es estilo de vida, nuevas y antiguas normas mezcladas.
Es necesario, sin embargo, evitar los excesos. Es sin duda la enseñanza que sus
terapeutas han inculcado a Tiger. Actualmente se excusa enormemente del mal que
hizo a su familia en su extravío y se muestra avergonzado. Su mujer, una modelo
sueca que frecuentaba sobre todo los circuitos de tenis, siempre amiga de Roger
Federer, acompaña las transformaciones de su marido, manteniéndose en un silencio
absoluto, dejándolo expresarse siempre solo. Es una posición original. Ni con él, ni sin
él, ella se hacer ver en público con los hijos, madre ejemplar.
Es así que viven aquellos que están “bajo la mirada del mundo” cuando las
particularidades de su sinthôme pasan al campo de lo visible. Justo antes del torneo
de Augusta, Nike difundió una publicidad, la primera desde el escándalo. La gran
marca abandonó, para esta ocasión, su slogan habitual “Just do it” que sin duda
hubiera sido visto como inoportuno. Nike realizó un sobrio spot de treinta segundos en
donde aparece Tiger, inmóvil, con una voz en off, la voz de hierro de su padre, Earl
Woods, que le pregunta fuera de contexto y con razón cuales han sido sus
pensamientos, sus sentimientos. El spot concluye “¿Did you learn anything?” ¿Has
aprendido algo?
La verdad y el goce no son siempre capitoneados por el Nombre-del-Padre, es una de
las enseñanzas que podemos sacar del material clínico del miércoles 28 de abril.
Como ustedes lo verán, comporta una secuencia en la que dos sujetos se encuentran
“bajo la mirada del mundo” de modo muy diferente que la star.
Nos aporta enseñanzas sobre las consecuencias para un sujeto de tener como
“escena primaria” la originalidad de sorprender a sus padres intercambiando parejas o
cómo un sujeto ha podido construir la particularidad de un travestismo o aun de una
determinación transexual. Encontrarán también, durante esa mañana, sujetos
neuróticos, histéricos u obsesivos, que no dejan, sin embargo, de ser sorprendentes
en la precipitación de su sinthôme. Los analistas dan cuenta también, de manera no
convenida, de sus posiciones y de sus intervenciones.
Lean, detalladamente el programa de la mañana del miércoles 28 de abril, el día “del
síntoma desnudado”.
Allí aprenderán con nosotros cómo la verdad es “hermana del
goce”, como lo dice Lacan en el Seminario 17.
Traducción: María Inés Negri
PROGRAMA DE LA MAÑANA DEL MIERCOLES 28 DE ABRIL
Seis salas sin traducción simultánea
Marco Focchi et Marcela Ruda
Les semblants du corps dérangés par le sinthôme
Focchi, Marco. « Tutto ma questo no ! »
Ruda, Marcela. El entierro del clown.
Marco Mauas et Sonia Chiriaco
L’hystérie et le sentiment du vivant
Mauas, Marco. La histeria no es teatro.
Chiriaco, Sonia. Le bruit des talons.
Ram. Mandil et Claude Quenardel
Le traumatisme de la scène primitive et les semblants de la jouissance
Mandil, Ram. Corpo : semblantes e sinthoma.
Quenardel, Claude. « Faire homme ».
Nicolas Jude et ElisaAlvarenga
Les semblants de la sexuation et l’au-delà du semblant phallique : travesti et
transexualisme
Jude, Nicolas. « Je suis borderline ».
Alvarenga, Elisa. A falo como semblante para um homem.
Eduardo Abello et Anne Béraud
La particularité de la jouissance féminine - L’hystérie du tout
Abello, Eduardo. El padre y lo ridiculo.
Béraud, Anne. Jouissance feminine et sinthome.
Santiago Castellanos de Marcos et Nathalie Georges
Le découpage des semblants du coprs par le texte et l’organe
Castellanos de Marcos, Santiago. El ilusionista.
Georges, Nathalie. Le procès verbal.
Pierre Naveau et Irene Kuperwajs
L’hystérie et les bords du vide
Naveau, Pierre. L’Européenne et son pari.
Kuperwajs, Irene. La « intacta ».
Ernesto Sinatra et Nathalie Charraud
L’usage des Noms du Père et le traitement de la forclusion
Sinatra, Ernesto. Un analisis cientifico.
Charraud, Nathalie. Du rond de ficelle au trèfle.
Fabian Fajnwaks et Paola Francesconi
La réduction signifiante maximale et le minimum vital
Fajnwaks, Fabian. La restauratrice.
Francesconi, Paola. L’insulto come Partner.
Damiasa Amadeo de Freda et Maria Cecilia Galletti Ferretti
Le traitement du sinthome par le semblant de l’inconsistance
Freda de, Damasia Amadeo. Del maltrato al amor.
Ferretti, Maria Cecilia Galletti. Tudo é protocolo.
Sophie Gayard et Liliana Rossi
Les semblants de la lettre comme bords de la jouissance
Gayard, Sophie. Fermer les yeux.
Rossi, Liliana. Del fracaso del semblante al sinthoma.
Catherine Meut et Irene Leonor Accarini
La création et les bords du réel
Meut, Catherine. Un travail sur le désastre.
Accarini, Irene Leonor. La palabra entre semblante y sinthome.
Adriana Luka et Christina Drummond
Le semblant du corps et le réel de la voix dans la névrose et la psychose
Luka, Adriana. « Yo no pertenezco a ese club ».
Drummond, Christina. Crer no corpo.
Simone Souto et Anne Ganivet-Poumellec
Traitements par des semblants particuliers de l’érotomane et du harcèlement au travail
Souto, Simone. Um jeito para o sinthoma.
Ganivet-Poumellec Anne. Un compte à rebours.
Marina Recalde et Amanda Goya
Le délire sur le père comme traitement de la forclusion
Recalde, Marina. Un-padre, un uso possible del semblante.
Goya, Amanda. Cuando un semblante se queda corto.
Luc Vander Vennet et Chantal Bonnaud
Le renversement du fantasme et le bord de la jouissance
Vander Vennet, Luc. Homosexualité féminine entre parenthèse
Bonnaud, Hélène. Conception, semblant et sinthome.
Hélène Deltombe et Victoria Horne
Ce qui ne cède pas dans la névrose
Deltombe, Hélène. Du symptôme au sinthome.
Horne Reinoso, Victoria. Garder la main.
Juan Fernando Perez et Dalila Arpin
Sous le regard du monde
Perez, Juan Fernando. Un sintoma, mis semblantes y mi encuentro con el
psicoanalisis
Arpin, Dalila. Faire de l’autre le point de mire.
Por Éric Laurent
Verdad y goce
Hoy va a comenzar el torneo de Golf de Augusta, el primero de la serie de los grandes
torneos. Va a marcar el retorno de Tiger Woods sobre los greens después del
espectacular escándalo sexual que se destapó luego de un accidente de auto a fines
de noviembre de 2009. Rápidamente, este accidente reveló ser el producto de una
mezcla detonante de una escena doméstica explosiva y de un somnífero Ambien©
comercializado en Francia bajo el nombre de Stilnox©. El nombre genérico es
Zolpidem©. Se le conocen efectos secundarios como el sonambulismo o
comportamientos automáticos extraños o inapropiados. Una docena de amantes del
mejor golfista de la historia pronto iban a manifestarse además de la que su mujer
había llamado desde su celular esa noche. Una de ellas, por otra parte, iba a revelar el
uso afrodisíaco que hacía Woods del Ambien©, uso inventivo, que no está en el
repertorio de la noticia, acompañarlo con Stilnox©. La particularidad de este
escándalo que ha impactado a los comentadores es doble. Por una parte la
abundancia de amantes, su sorprendente vulgaridad, especialmente una de los pornstars
que da a conocer de manera exhaustiva los detalles de la relación. Por otra
parte la crudeza de los textos de contenido sexual que la estrella del golf dirigía a sus
múltiples conquistas. Estos SMS rápidamente han recibido el nombre de “sextos”.
El conjunto contrastaba violentamente con el aire de yerno ideal que había impuesto
Woods cuyos contratos publicitarios habían alcanzado las sumas más elevadas jamás
registradas en la historia de todos los deportes.
Hasta la muerte de su padre, en el 2006, Tiger llevaba una vida ejemplar consagrada
al perfeccionamiento de su juego. Parecía tímido con las damas. Este perfeccionista
ha sido capaz, aunque tenía 10/10 en los dos ojos, hacerse operar para mejorar su
visión. Todo estaba en armonía. Había logrado ser el jugador sobre el que reposaba el
éxito de la audiencia televisiva cuando transmitían los torneos de golf, que no tienen,
no obstante, el ritmo frenético del football, del basket, o incluso del tenis.
¿Cómo iba a salvar los semblantes? La apuesta tenía su envergadura para el deporte,
el monto de la renta de la televisión y los anunciantes. Lo primero que él ha
emprendido es una terapia para su “adicción sexual”. Es ahora norma para los actores
o deportistas que son descubiertos como serial-philanderers.
Esta concepción de la adicción sexual contribuye a invalidar la vieja concepción de la
“perversión” con la admisión de los derechos de los gay en la armada, los matrimonios
del mismo sexo, la salida del transexualismo del cuadro de las afecciones, etc. Todo lo
concerniente a la sexualidad es estilo de vida, nuevas y antiguas normas mezcladas.
Es necesario, sin embargo, evitar los excesos. Es sin duda la enseñanza que sus
terapeutas han inculcado a Tiger. Actualmente se excusa enormemente del mal que
hizo a su familia en su extravío y se muestra avergonzado. Su mujer, una modelo
sueca que frecuentaba sobre todo los circuitos de tenis, siempre amiga de Roger
Federer, acompaña las transformaciones de su marido, manteniéndose en un silencio
absoluto, dejándolo expresarse siempre solo. Es una posición original. Ni con él, ni sin
él, ella se hacer ver en público con los hijos, madre ejemplar.
Es así que viven aquellos que están “bajo la mirada del mundo” cuando las
particularidades de su sinthôme pasan al campo de lo visible. Justo antes del torneo
de Augusta, Nike difundió una publicidad, la primera desde el escándalo. La gran
marca abandonó, para esta ocasión, su slogan habitual “Just do it” que sin duda
hubiera sido visto como inoportuno. Nike realizó un sobrio spot de treinta segundos en
donde aparece Tiger, inmóvil, con una voz en off, la voz de hierro de su padre, Earl
Woods, que le pregunta fuera de contexto y con razón cuales han sido sus
pensamientos, sus sentimientos. El spot concluye “¿Did you learn anything?” ¿Has
aprendido algo?
La verdad y el goce no son siempre capitoneados por el Nombre-del-Padre, es una de
las enseñanzas que podemos sacar del material clínico del miércoles 28 de abril.
Como ustedes lo verán, comporta una secuencia en la que dos sujetos se encuentran
“bajo la mirada del mundo” de modo muy diferente que la star.
Nos aporta enseñanzas sobre las consecuencias para un sujeto de tener como
“escena primaria” la originalidad de sorprender a sus padres intercambiando parejas o
cómo un sujeto ha podido construir la particularidad de un travestismo o aun de una
determinación transexual. Encontrarán también, durante esa mañana, sujetos
neuróticos, histéricos u obsesivos, que no dejan, sin embargo, de ser sorprendentes
en la precipitación de su sinthôme. Los analistas dan cuenta también, de manera no
convenida, de sus posiciones y de sus intervenciones.
Lean, detalladamente el programa de la mañana del miércoles 28 de abril, el día “del
síntoma desnudado”.
Allí aprenderán con nosotros cómo la verdad es “hermana del
goce”, como lo dice Lacan en el Seminario 17.
Traducción: María Inés Negri
PROGRAMA DE LA MAÑANA DEL MIERCOLES 28 DE ABRIL
Seis salas sin traducción simultánea
Marco Focchi et Marcela Ruda
Les semblants du corps dérangés par le sinthôme
Focchi, Marco. « Tutto ma questo no ! »
Ruda, Marcela. El entierro del clown.
Marco Mauas et Sonia Chiriaco
L’hystérie et le sentiment du vivant
Mauas, Marco. La histeria no es teatro.
Chiriaco, Sonia. Le bruit des talons.
Ram. Mandil et Claude Quenardel
Le traumatisme de la scène primitive et les semblants de la jouissance
Mandil, Ram. Corpo : semblantes e sinthoma.
Quenardel, Claude. « Faire homme ».
Nicolas Jude et ElisaAlvarenga
Les semblants de la sexuation et l’au-delà du semblant phallique : travesti et
transexualisme
Jude, Nicolas. « Je suis borderline ».
Alvarenga, Elisa. A falo como semblante para um homem.
Eduardo Abello et Anne Béraud
La particularité de la jouissance féminine - L’hystérie du tout
Abello, Eduardo. El padre y lo ridiculo.
Béraud, Anne. Jouissance feminine et sinthome.
Santiago Castellanos de Marcos et Nathalie Georges
Le découpage des semblants du coprs par le texte et l’organe
Castellanos de Marcos, Santiago. El ilusionista.
Georges, Nathalie. Le procès verbal.
Pierre Naveau et Irene Kuperwajs
L’hystérie et les bords du vide
Naveau, Pierre. L’Européenne et son pari.
Kuperwajs, Irene. La « intacta ».
Ernesto Sinatra et Nathalie Charraud
L’usage des Noms du Père et le traitement de la forclusion
Sinatra, Ernesto. Un analisis cientifico.
Charraud, Nathalie. Du rond de ficelle au trèfle.
Fabian Fajnwaks et Paola Francesconi
La réduction signifiante maximale et le minimum vital
Fajnwaks, Fabian. La restauratrice.
Francesconi, Paola. L’insulto come Partner.
Damiasa Amadeo de Freda et Maria Cecilia Galletti Ferretti
Le traitement du sinthome par le semblant de l’inconsistance
Freda de, Damasia Amadeo. Del maltrato al amor.
Ferretti, Maria Cecilia Galletti. Tudo é protocolo.
Sophie Gayard et Liliana Rossi
Les semblants de la lettre comme bords de la jouissance
Gayard, Sophie. Fermer les yeux.
Rossi, Liliana. Del fracaso del semblante al sinthoma.
Catherine Meut et Irene Leonor Accarini
La création et les bords du réel
Meut, Catherine. Un travail sur le désastre.
Accarini, Irene Leonor. La palabra entre semblante y sinthome.
Adriana Luka et Christina Drummond
Le semblant du corps et le réel de la voix dans la névrose et la psychose
Luka, Adriana. « Yo no pertenezco a ese club ».
Drummond, Christina. Crer no corpo.
Simone Souto et Anne Ganivet-Poumellec
Traitements par des semblants particuliers de l’érotomane et du harcèlement au travail
Souto, Simone. Um jeito para o sinthoma.
Ganivet-Poumellec Anne. Un compte à rebours.
Marina Recalde et Amanda Goya
Le délire sur le père comme traitement de la forclusion
Recalde, Marina. Un-padre, un uso possible del semblante.
Goya, Amanda. Cuando un semblante se queda corto.
Luc Vander Vennet et Chantal Bonnaud
Le renversement du fantasme et le bord de la jouissance
Vander Vennet, Luc. Homosexualité féminine entre parenthèse
Bonnaud, Hélène. Conception, semblant et sinthome.
Hélène Deltombe et Victoria Horne
Ce qui ne cède pas dans la névrose
Deltombe, Hélène. Du symptôme au sinthome.
Horne Reinoso, Victoria. Garder la main.
Juan Fernando Perez et Dalila Arpin
Sous le regard du monde
Perez, Juan Fernando. Un sintoma, mis semblantes y mi encuentro con el
psicoanalisis
Arpin, Dalila. Faire de l’autre le point de mire.
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